Etérea, corruptible por un mundo natural
en el que vive inmersa.
La perfección entremezclada con redefiniciones
degeneradas de la naturaleza.
Ciclos de cadenas doradas; interminables...
Que giran sin rumbo y sin propósito:
cadenas desencadenables.
Círculos sin principio ni fin
sin comienzo ni destino;
pero sí con una cumbre y un abismo,
un autor y un autismo
causado por una ocupación ajena:
ahora el ciclo en el abismo.
Manchas cegadoras de impulsos vitalicios,
una sombra que oculta la verdad.
Realismo.
Progreso.
Todo ciclo reanuda a su comienzo.
(Un comienzo inexistente) Una cumbre permanente
que a veces sucumbe, pero siempre vuelve.
Todo pasado permanece presente.
en el que vive inmersa.
La perfección entremezclada con redefiniciones
degeneradas de la naturaleza.
Ciclos de cadenas doradas; interminables...
Que giran sin rumbo y sin propósito:
cadenas desencadenables.
Círculos sin principio ni fin
sin comienzo ni destino;
pero sí con una cumbre y un abismo,
un autor y un autismo
causado por una ocupación ajena:
ahora el ciclo en el abismo.
Manchas cegadoras de impulsos vitalicios,
una sombra que oculta la verdad.
Realismo.
Progreso.
Todo ciclo reanuda a su comienzo.
(Un comienzo inexistente) Una cumbre permanente
que a veces sucumbe, pero siempre vuelve.
Todo pasado permanece presente.
Para Gracie Zales.