Hoy estaba conversando con un amigo mío por el messenger y estábamos hablando de viejos recuerdos. Nuestra amistad ha crecido por 3 años y hace poco nos volvimos a reencontrar, luego de una separación muy grande que él provocó por su indiferencia, y yo por mi obstinación.
Mientras conversábamos amenamente me dijo...
-- Siempre que escucho hablar del amor me recuerda a tí.
-- ¿Ajá? ¿Y eso por qué?
-- Porque tú me enseñaste muchas cosas.
-- ¿Cosas como cuáles?
-- Si. Muchas cosas, como la paciencia, el perdón, pero sobre todo:
Me enseñaste que el amor no es estar ahí sin que nada te falte,
Sino que el amor sin importar la distancia
es aquel que nos da la libertad de poder ser como somos,
el amor es el que mantiene:
"EL HACER FELIZ PARA SER FELIZ"
Me quedé sin habla... había olvidado el verdadero propósito por el cual uno ama, y no pensé que fuera a calar tan hondo en mi amigo, y mucho menos pensé que muchos años después, la enseñanza que yo le dí se iba a convertir en enseñanza para mí también...
2 comments:
La mayoria de las veces, las cosas que hacemos mejor y que dan significado a alguien o algo es la que nos sale de lo profundo del ser, sin tener la mas remota idea de la fuerza con la cual se dice, por ende, es imperseptible a nuestros odios, al pasar el tiempo nos damos cuenta de lo que se dijo y eso, si nos llegamos a dar cuenta.... Sigue asi, tus palabras acortan distancias.
mmm interesante post la verdad... muchas veces no nos damos cuenta la huella q dejamos en las personas y lo mejor aun cuando esas personas dejan huella en uno tambien
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